Del Producto Editorial al Product-Led Growth

En 2012, cuando le decía a la gente que creaba productos editoriales para capitalizar la pauta publicitaria de escuelas y mencionaba SEO, redes sociales o email marketing, me tomaban poco en serio. Ver internet como un canal de negocio era, para muchos, poco convencional; para algunos, hasta absurdo.

Spoiler: ese modelo no solo funcionó, sino que lo rentabilicé durante 12 años y generó empleo.

Hoy, en pleno 2025, la industria ha adoptado esos mismos términos como su estándar. El SEO es una línea en cada descripción de puesto y los recién egresados buscan en el marketing digital su primera fuente de ingresos. Esta saturación es la señal más clara que existe: la estrategia ha perdido su ventaja, el océano ha dejado de ser azul y es hora de pivotar.

Cuando ves que términos como "Redactor SEO" o "experto en copys con SEO" se vuelven comunes, y las agencias reclutan especialistas en masa, entiendes que el juego ha cambiado. Es el momento de dejar de competir en ese campo de batalla y construir el siguiente.

Ese nuevo campo de batalla es el producto digital.

Alzar la Barrera de Entrada

En un mundo donde cualquiera con acceso a GPT puede generar contenido estructurado a la velocidad de la luz, la única defensa es la creatividad estratégica. Debemos atender las necesidades de información desde un ángulo donde a la competencia le tome tiempo reaccionar y a la industria, años en adoptar.

¿La forma más efectiva de lograrlo? Crear un producto digital.

Un producto bien diseñado es, por naturaleza, una barrera de entrada. Mientras que un artículo puede ser copiado en minutos, un producto requiere una visión de crecimiento (Product-Led Growth), un equipo de desarrollo y una profunda empatía por el usuario para ver la luz. Es un foso que te protege de la competencia comoditizada.

Los Retos que lo Justifican (y lo Hacen Inevitable)

No es una elección, es una reacción a la realidad. El uso intensivo de video y la fragmentación de la lectura ya son una amenaza para el contenido editorial tradicional. Pero la verdadera disrupción está a la vuelta de la esquina: la batalla por las búsquedas asistidas por IA cambiará las reglas del juego para siempre.

Estamos observando el inevitable declive del alcance orgánico. Como consecuencia directa, los precios de la pauta publicitaria se disparan. Este es un escenario fantástico para los gigantes dueños de los ecosistemas, y uno muy peligroso para nuestras estrategias de crecimiento y descubrimiento.

No podemos seguir jugando en un tablero donde las reglas están diseñadas para que perdamos.

La Solución: El Ascenso del Inventor Digital

El producto debe ser el motor de crecimiento del negocio. Esta filosofía, conocida como Product-Led Growth, es la evolución natural del internet que estamos viviendo.

Hace 15 años, los técnicos creaban la web. Hoy, la web para muchos es YouTube, TikTok o Instagram: plataformas donde la gente solo necesita creatividad para crear, no un stack técnico para mantener. El ciclo del contenido como ventaja competitiva se cerró. Entramos en la era de las experiencias.

Nuestro trabajo ya no es solo crear contenido para esas plataformas. Es desarrollar las herramientas —los productos— que los usuarios necesitan hoy y necesitarán en el futuro.

Esto da lugar a un nuevo tipo de profesional. Ya no es suficiente con ser un estratega de marketing, ni tampoco un ingeniero aislado. La era del producto demanda Inventores Digitales Estratégicos: personas con una profunda empatía por el usuario, con la visión de negocio para detectar oportunidades y con la afinidad técnica para transformar esas visiones en herramientas reales.

El futuro no pertenece a quienes mejor describen el mundo, sino a quienes lo construyen.